miércoles, 14 de noviembre de 2018

PLAZA DE MAYO. EL CENTRO DE LA HISTORIA


La plaza es siempre el corazón de un pueblo o ciudad. Hay plazas muy famosas en todo el mundo por razones específicas. La mayoría de ellas está asociada a un acontecimiento histórico o un hecho político o cultural o artístico. Por ejemplo la Piazza de San Marcos (Venecia) la Plaza de Tlatelolco (Ciudad de México) la Place de la Concorde (París) o Trafalgar Square (Londres). Y esa gran galería de sitio memorables, también hay un lugar para la Plaza de Mayo de Buenos Aires. Para los argentinos no es una plaza, es el centro de la historia, de su historia como país.



En septiembre de 2006 se estrenó  en la plaza la instalación artístico sonora  Mayo, Los Sonidos de la Plaza (1945-2001). Fue un trabajo de musicólogo y periodista Martín Luitt que definió su trabajo como “una inmersión sonora en la historia”. De más está decir que la presentación ese 10 de septiembre fue todo un éxito. Los porteños acudieron en  número como para llenar el recinto y escuchar  los sonidos del 17 de octubre de 1945 o los murmullos al principio y los cánticos después de las rondas de los jueves de las Madres de Plaza de Mayo o el discurso de Alfonsin desde el Cabildo en el estreno de la nueva democracia.
Aquella propuesta sonora solo era posible porque la plaza es algo más que un recinto de encuentros de la sociedad porteña. La Plaza de Mayo es la caja de resonancia para lo bueno y para lo malo de todo lo que ocurra en la sociedad argentina. Los límites emocionales de la plaza son las  fronteras de Argentina. Los límites físicos son apenas dos manzanas delimitadas por las calles Rivadavia, Balcarce, Hipólito Irigoyen y Bolívar. Un lugar ubicado en el extremo Este de la ciudad pegado al Río de la Plata en sus orígenes, aunque ahora el río ha quedado bastante lejos por la constante expansión de la ciudad sobre la costa.



La plaza es el sitio donde Juan de Garay puso el famoso tronco que simbolizaba la justicia, para dejar fundada por segunda vez la ciudad. Fue el 11 de junio de 1580, cuarenta y cuatro años después de la primera fundación de Pedro de Mendoza en febrero de 1536. Esta fue en las barrancas del actual Parque Lezama. Pero Garay prefirió los bajos de esta zona de la costa. A partir de ahí, trazó las mensuras que establecerían las titularidad de las tierras repartidas entre el casi centenar de hombres que lo acompañaron desde Asunción del Paraguay.



El 25 de mayo de 1941, ciento treinta y un años después del primer gobierno patrio argentino,  la Comisión Nacional de Museos y Monumentos Históricos, colocó una plaza de bronce al pie de la Pirámide de Mayo (realizada por el escultor Manuel F. Vilaboa) con un texto que refleja fielmente la historia del lugar:
“En esta Plaza Histórica el fundador Juan de Garay plantó el símbolo de la justicia el 11 de junio de 1580. La Plaza Mayor fue desde entonces el centro de la vida ciudadana donde el pueblo celebró sus actos más solemnes como sus fiestas y expansiones colectivas. La Reconquista y la Defensa de la ciudad culminaron en la Plaza Mayor que se denominó Plaza de la Victoria. En 1810 fue el glorioso escenario de la Revolución de Mayo y en 1811 levantose en ella la Pirámide conmemorativa de la fecha patria: hechos trascendentales de la Historia Argentina se sucedieron en la Plaza de la Victoria. Aquí el pueblo de Buenos Aires juró la Independencia de la patria el 13 de septiembre de 1816 y la Constitución Nacional el 21 de octubre de 1860. El edificio de la Recova Vieja, demolida en 1884 fue un rasgo característico en los tiempos de la Independencia y de la Organización Nacional”.
La Plaza de la Victoria a la que se refiere el texto era el actual sector oeste de la plaza, del lado del Cabildo y culminaba en la Recova Vieja que no era otra cosa que un gran mercado de frutos del país, donde se aprovisionaba el pueblo de la pequeña ciudad que era entonces Buenos Aires. Al otro lado, del lado Este, en dirección al río, estaba la Plaza del Fuerte, cuya muralla este daba directamente sobre el agua. El espacio que ocupaba ese fuerte   es donde está la actual Casa Rosada, como comúnmente se conoce a la Casa de Gobierno, sede de la Presidencia de la Nación. La Plaza de la Victoria era denominada Plaza Mayor durante la época virreinal y al demolerse la Recova Vieja pasó a denominarse Plaza de Mayo en honor al 25 de Mayo, fecha del primer gobierno argentino y que dará lugar al comienzo de un largo proceso que culminará con la Declaración de la Independencia en 1816.



La vida del lugar hoy tiene muy poco que ver con sus orígenes. Es un lugar de trasiego intenso desde las primeras horas del día, incluso un poco antes que aparezca el sol sobre la costa del río. Alrededor se sitúan la Catedral metropolitana, El Cabildo antiguo, la sede central del Banco de la Nación Argentina, la Casa Rosada, el Ministerio de Hacienda y Economía, las oficinas centrales del principal organismo impositivo del país, la AFIP, además de otros edificios de bancos y aseguradoras. La plaza también es el eje del principal centro económico y financiera del país, conocido como La City Porteña. Todo esto explica por sí solo,  la gran cantidad de personas que circulan por ella a lo largo del día. Además de los turistas que,  por cierto, no son pocos.

Galería de imágenes en Flickr en los  álbumes  Plaza deMayo – Amanecer (I) y Plaza de Mayo – Amanecer (II)

NOTA: para una información más pormenorizada, sugiero consultar estos enlaces de Wikipedia y Arcón de Buenos Aires